
Antecedentes y problemas
Las actividades mineras pueden causar modificaciones en las condiciones ecohidrológicas; como por ejemplo: al desarrollar infraestructura de suministro de agua para el procesamiento del mineral o por hundimientos de las minas debajo del nivel superior del nivel freático ocasionando inundaciones, entre otros.
Las actividades asociadas con la minería que impactan en la ecohidrología local incluyen:
- desarrollo del abastecimiento de agua para la mina;
- limpieza de terrenos;
- eliminación de agua de minas (drenaje de ácido minero);
- almacenamiento de relaves mineros (represa de relaves);
- gestión del espacio cuando cesa la minería.
La minería ocupa un lugar preeminente en la economía australiana, devolviendo grandes dividendos económicos a la nación a partir de demandas relativamente pequeñas de recursos hídricos (a escala regional, aunque grandes a escala local, en algunos casos), particularmente en comparación con el sector agricultura. Sin embargo, los impactos de la minería en la hidrología local pueden ser altos y, a menudo, implican cambios en la cantidad y calidad del agua. A continuación se presenta el caso de la mina Olympic Dam.
Mina Olympic Dam
Los Mound Springs del sur de Australia (figura 1) son una característica única de descarga de agua subterránea de la Gran Cuenca Artesiana (GAB), la cual es un sistema de agua subterránea regional profundo que cubre el 22% del continente australiano. Son las principales fuentes de aguas superficiales en el corazón interior árido a semiárido de Australia, y tienen una gran importancia ecológica, científica, antropológica y económica. La extracción excesiva de la Gran Cuenca Artesiana durante el siglo pasado por parte de la actividad europea ha visto una disminución general en los flujos de los manantiales . El reciente desarrollo de los pozos de suministro de agua para la mina de cobre y uranio de la Olympic Dam (figura 2) en medio de uno de los grupos de manantiales más importantes ha exacerbado este problema (Mudd, 2000).

De las muchas presiones sobre los recursos de agua subterránea de la GAB, pocas proporcionan un retorno financiero tan grande por unidad de agua como la mina de cobre y uranio de la Olympic Dam de Western Mining Corporation en el sur de Australia. La planta comenzó la producción comercial en 1988, desarrollando el yacimiento de mineral de uranio más grande conocido del mundo. La mina produce cobre, óxido de uranio, plata y oro. Las operaciones mineras en el sitio de Olympic Dam han impactado en los Mound Springs de la GAB cerca de la mina. Se espera que la mina opere durante al menos otros 50 a 100 años.
Un gran desafío para el desarrollar estas zonas áridas es asegurar un suministro de agua constante y adecuado. El suministro de agua para la mina y el municipio asociado depende de dos campos de pozos remotos (A y B) en el extremo sur de la GAB cerca del lago Eyre, a una distancia de 80 a 200 km. Estos campos de perforación están en la proximidad del supergrupo de Mound Springs del lago Eyre (Fig. 3), y desde el principio se esperaba algún impacto de la minería.

Las aguas subterráneas designadas previamente a otros usuarios, como por ejemplo los pastores, mantienen su derecho a utilizar la mismas «fuentes» para el desarrollo de las actividades existentes. Existen evidencias que debido a la extracción de agua subterránea para las actividades mineras, otras industrias se vieron reducidas en el abastecimiento.
Se han producido impactos ecológicos claros en los ecosistemas de Mound Springs como resultado de la extracción de agua para la minería, y existe preocupación en muchos sectores con respecto a los impactos futuros. En tales ecosistemas aislados con total dependencia del flujo de agua subterránea, el cese del flujo conduce a la eliminación local de especies endémicas como lo explica Eaumus et al (2006) y no necesariamente una restauración del flujo significa que también se pueda restaurar esta fauna.
Mecanismos de atenuación
Se han identificado mecanismos para evitar un mayor colapso de los Mound Springs en la región (Eamus et al, 2006), los cuales se nombran a continuación:
- Aumentar la eficiencia del agua en la mina (agua utilizada por unidad de tonelada de mineral procesado). En los últimos años se ha incrementado en un 25%.
- Finalización del programa de tapado de perforaciones para las perforaciones pastorales de flujo libre restantes y la tubería y el control de las reservas de agua (esto conserva el recurso tanto para el medio ambiente como para la industria).
- Rediseño y la reubicación de perforaciones o campos de pozos a ubicaciones más alejadas de los Mound Springs.
- Las presiones locales del agua subterránea o los regímenes de flujo en la vecindad de los manantiales en riesgo pueden mantenerse artificialmente hasta que surjan soluciones a más largo plazo.
La forma de garantizar la integridad ecológica y mitológica a largo plazo de los Mound Springs y la vida silvestre asociada es: protegiendo la calidad y la cantidad de agua que fluye a los manantiales individuales. Para ello, Mudd (2000) recomienda lo siguiente:
- Cierre permanente y rápido del pozo A.
- Iniciar los estudios de un nuevo pozo “C”, ubicado entre 100 y 200 km más al noreste del pozo B.
- Evaluar Mound Springs, incluida una revisión histórica extensa, y el impacto de los campos perforados en los manantiales y GAB en la región del lago Eyre.
- Iniciar investigaciones para opciones de remediación de todos los manantiales afectados en la región del lago Eyre .
A modo de reflexión
La mina Olympic Dam ejemplifica los problemas asociados con el establecimiento de una gran operación industrial en una región donde el agua es un recurso limitante. Este caso revela cómo la extracción de agua puede ser un tema con carga social que puede tener impactos significativos a largo plazo en las relaciones comunitarias con un desarrollo industrial. Las Declaraciones de Impacto Ambiental son un medio importante para sintetizar formalmente los datos científicos de una región, pero dichos documentos por sí solos no pueden suplantar las prácticas de gestión adecuadas. Dada la naturaleza a corto plazo de las operaciones mineras y los impactos a largo plazo de la extracción de agua, generalmente no existe un incentivo inherente para la conservación del agua. Mudd y Ali (1999) proponen reconsiderar la viabilidad de operaciones tan grandes en un entorno de limitación de agua.
Los temas clave que surgen de este caso son la naturaleza de las compensaciones entre los ecosistemas dependientes del agua subterránea en zonas áridas y la industria dependiente del agua, así como la necesidad de monitoreo y la gestión adaptativa frente a la escasa y limitada disponibilidad de datos para la planificación inicial (Eaumus et al., 2006).
Para saber más de este tema:
Eamus, D., Hatton, T., Cook, P., & Colvin, C. (2006). Ecohydrology. Vegetation Function, Water and Resource Management. CSIRO Publishing.
Kinhill, 1997, Olympic Dam Expansion Project Environmental Impact Statement, Prepared forWMC (Olympic Dam Corporation) Pty Ltd by Kinhill Engineers Pty Ltd, May 1997, 500 p.
Mudd, G. (2000). Mound Springs of the Great Artesian Basin in South Australia: a case study from Olympic Dam. Environmental Geology 39, 463–476 (2000). https://doi-rg.uaccess.univie.ac.at/10.1007/s002540050452
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